martes, 3 de mayo de 2011

Olvidaste pintalabios en bocas que no eran la mía

Si te faltan sonrisas, llámame, da igual que sea de madrugada, siempre tendré una preparada para ti, de las buenas, de esas que tardan en caducar y se dejan ver sin vergüenza. No importa si has olvidado reir, puedo darte clases particulares, pero solo de lunes a domingo y bajo el árbol de mi calle. Voy a enseñarte a reir a carcajadas y a envirme sms las noches de sábado que no esté en los que digas que te acojona el frío, el frío sin mí. Atraparé una hora para que el tiempo que compartamos sea más largo, te enseñaré a capturar minutos y así tendremos una eternidad de frío bonito. Tiraré poemas desde mi balcón y esperaré que vuelen alto y entren por la ventana de tu habitación para que te digan todo lo que por teléfono no me atrevo. Aprenderás a señalar todas las calles que quieres pisar conmigo y yo señalaré todas las montañas que nos harán de cama. Cambiaré cuatro recuerdos por cuatro estaciones a tu lado, y dejaré al invierno calentarnos sin chimenea, al verano acariciarnos con las manos heladas, al otoño le dejaré vestir los árboles y a la primavera no le diré nada. Buscaré mil besos entre los sobres de las cartas que no pude enviarte y me los meteré en el bolsillo para cuando estés cerca, podrás cogerlos si quieres. Saltaré todos los charcos que encuentre y llegaré hasta tu puerta con momentos en blanco que escribiremos a escondidas.

3 comentarios:

F. dijo...

Joder, qué bonito...yo quieroooooo jajajajaa

besoss

Sol en las alturas dijo...

Jajaja, muchas gracias :-)

Clementine dijo...

Ay, que bonito. Puro amor.