miércoles, 2 de febrero de 2011

Noche

Adoro la oscuridad, sobretodo la de la noche. Siento cierta atracción por los juegos nocturnos, como fotografiar coches y motos dibujando caricias en un asfalto somnoliento a las 3 de la madrugada. En la oscuridad todo vive con menos vergüenza, las cosas tienen menos miedo de pasar, y suelen hacerlo más lentamente, dándote tiempo para saborear cada instante. Me gusta dejar el sentido de la vista a un lado y notar cómo se agudiza el resto. Algunas cosas que verdaderamente merecen la pena ver solo consigues verlas ahí. Aquella... aquella oscuridad fue la luz más bonita que había visto. En la oscuridad lo sabes todo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Esas son mis noches, y tu lo sabes, esas noches secretas, donde nadie sabe que pasa hasta que vuelve a amanecer.


M.

Anónimo dijo...

Me parece que ahora eres tu la que te metes en mi cabecita loca :D, me conoces suficiente para saber que eso lo sufro yo todas las noches, solo que tu lo pintas todo con color :)
gracias tontiiss! (L)

Paloma Polaca dijo...

¿Has mirado al cielo cuando la Luna está oculta?

Para mí eso es lo mejor de la noche.

Es una pena que las lámparas de sodio se coman la oscuridad.