lunes, 25 de julio de 2011

Escondes el otoño

Háblame en tu ondulado idioma de tejado descosido y visagras oxidadas. Valvucéame qué es lo que ves desde tu altanera figura, donde se posan las cigüeñas a ver pasar la primavera. Escondes el otoño del tacto de todos nosotros. Lo emparedas entre tus ladrillos podridos de resguardar estaciones. Liberas las flores silvestres que te rodean y llegan hasta mí sus colores. Campanario de este pueblo mío, envejeces con solo mirarte. Te respiro en este viernes nublado y siento que te desgasto el alma. No llueve y te mojas: son lágrimas de esta plaza que no quiere verte desaparecer.

6 comentarios:

nanarandano dijo...

Vaya, yo estoy sin inspiración y tengo que forzar las palabras, y tú, aquí, recortándolo todo. Besos.

P.S.: Soy Petite Mdemoiselle, cambio de nombre, de look y de todo.

Kate dijo...

Y yo bajo este sol, despierto hoy deseando el invierno en una plaza como esa arropándome y con la nariz fría pero el corazón calentito xD
Soy una nueva visitante en este blog ^^

TORO SALVAJE dijo...

Que emotivo!!!

Me has llenado de nostalgia.

Saludos.

Nereidas-andresdeartabroblogpost,com dijo...

Eres poesía que nace en ti como el musgo en ese viejo campanario. Al leerte haces respirar amor hasta de la humedad del ambiente.
¡Me ha gustado tu casa y amenazo con volver.!
Un beso

Sandra dijo...

Se pueden esconder las estaciones? Creo que no.
Saludos

Noelia dijo...

Que hermoso esto que escribistes, por eso creoque todo lo que podamos añadir solo puede estropearlo jaja